La práctica de enviar a nuestros mayores a residencias de la tercera edad cuando ya no se valen por sí solos o necesitan cuidados especiales, se sustituye cada vez más, por el hábito de contratar a
enfermeras a domicilio. Esta alternativa, además de suponer un ahorro económico para la persona o familia, también supone una tranquilidad y comodidad para el paciente, facilitando así su proceso de recuperación o ayudándoles en su día a día. Aquellos que somos especializados en la materia sabemos que establecer este tipo de contratos de asistencia a domicilio es, en muchas ocasiones, difícil debido a la desconfianza de dejar entrar a un desconocido en tu casa. Por ello, cuando ofrecemos nuestros servicios a particulares es importante mostrar nuestra cara más humana, ya que nuestros retos, objetivos y éxitos se deberán a nuestros pacientes.
¿Qué es lo que más se valora a la hora de contratar una enfermera para asistir a domicilio? Puesto que los servicios para asistir a domicilio son escasos. Recientemente han surgido empresas como
ATEND, en los cuales profesionales como los del sector de la enfermería pueden ofrecer sus servicios a un particular. Pero para ofrecer un servicio óptimo a nuestros pacientes y que el cliente se decante,
Atend pone en cuenta unos factores clave:
Paciencia y empatía. No debemos olvidar que trabajamos con personas con problemas de salud, y la sensibilidad emocional es uno de los valores más importantes para ayudar a la recuperación o al cuidado del paciente. Por esta razón, mostrar una actitud atenta desde la primera toma de contacto entre enfermero-paciente es de suma importancia.
Profesionales a tu disposición. En Atend tenemos ciertos lineamientos y estandares muy altos que pasan nuestras enfermeras para ser contratadas. Cada servicio que prestamos es único, pues no todas las enfermedades afectan a los pacientes de la misma forma, por lo que un nuevo paciente siempre supondrá un nuevo reto. Saber cómo afrontarlo será lo que finalmente proporcione la satisfacción del cliente.
Flexibilidad máxima. Cuando se trata de enfermería a domicilio, la mayoría de casos consisten en
asistencia domiciliaria a personas mayores. Sin embargo, estas no son las únicas ocasiones en las se requiere. Las funciones de nuestras enfermeras van desde aliviar el sufrimiento de un enfermo hasta la realización de actividades en pacientes quienes sufren trastornos mentales o alguna discapacidad física hasta el cuidado de bebés y atención de servicios de emergencia en días u fechas donde es casi imposible encontrar a alguien disponible.